No retroceden. Luego del contundente paro en la provincia de Tacna, representantes de organizaciones civiles y autoridades acordaron suspender la nueva tarifa del agua impuesta por la Entidad Prestadora de Servicios de Saneamiento (EPS). Dicha promesa no podrá cumplirse por decisión de la Superintendencia Nacional de Servicios de Saneamiento (Sunass).

La entidad estatal informó que la actualización en las tarifas favorece la calidad del servicio y la mejora en el saneamiento. Remarcaron que el cambio en la tarifa está sustentado en un diagnóstico elaborado en base a los requerimientos de la población y la necesidad de invertir en infraestructura.

Por otra parte, la Sunass dejó entrever que existen injerencias políticas y presiones detrás de la resistencia al cambio de tarifa. “En ese sentido, el marco legal de los organismos reguladores (…) velan por la independencia y autonomía del Regulador, impidiendo que éste sea presionado o condicionado por actores o grupos de interés específicos”, detallaron en su comunicado.

Tras conocer la postura de los funcionarios de Sunass, dirigentes han anunciado que mañana se reunirán y organizarán una conferencia para dar alcance de las nuevas medidas que acatarán luego de recibir esta negativa.

El pasado 15 y 16 de mayo, diversas organizaciones sociales salieron a las calles y acataron una paralización que afectó el sector comercial, educación y transporte. Fueron al menos 5 mil personas que protestaron contra la nueva tarifa de agua que está vigente desde febrero de este año.

Al segundo día de las manifestaciones, la Entidad Prestadora de Servicios de Saneamiento (EPS) Tacna se comprometió a suspender el alza hasta presentar junto a la sociedad civil, una nueva propuesta técnica ante la Sunass.