Presidente de la comunidad, Gregorio Rojas, afirmó que apuestan por una minera responsable y que cumpla con los compromisos. Señaló que aceptan la propuesta de una vía alterna.
El presidente de la comunidad campesina de Fuerabamba de Apurímac, Gregorio Rojas, afirmó que los comuneros están a favor de una minería responsable y rechazó que sean “antimineros”, en referencia al conflicto con la empresa MMG Las Bambas.
No obstante, Rojas anunció que recurrirán ante una instancia internacional para solicitar una auditoria para que investigue el conflicto social.
En entrevista a RPP Noticias, el representante de la comunidad de Fuerabamba sostuvo que están de acuerdo con que se construya otra vía a fin de que cese el paso de vehículos de la minera en el tramo de 12 kilómetros de la vía nacional CU—135, que cruza el fundo Yavi Yavi en Chumbivilcas, Cusco.
“Nosotros, la comunidad, apostamos por la minería. Queremos una minería responsable. No somos antimineros. Una minería que cumpla con los compromisos. Vamos a llegar a otras instancias para pedir una auditoría internacional para que se investigue Las Bambas”, acotó.
“El gobernador regional de Cusco llegó hasta la ciudad de Lima y propuso sacar una vía alterna y nosotros [con eso] estaríamos solucionando y es viable (…) Nosotros queremos respeto a la propiedad [vía]. No estamos pidiendo ni diez céntimos ni un sol acá. Queremos que el camino se construya en otro lugar y se respete la propiedad privada”, remarcó Gregorio Rojas.
El líder de la comunidad campesina de Fuerabamba detalló que desde este año, luego de una asamblea, contrataron los servicios de asesores legales.
Señaló que la vía es de la comunidad y el Estado peruano no debe intervenir. “Es una propiedad privada. Nosotros somos propietarios. Esto para mí, para la comunidad no es una vía nacional. No tienen un expediente técnico de la carretera”, indicó
Fuente: RPP
Brindó atención especializada los días 22, 23 y 24 abril en ambientes ubicados en Terminal Terrestre de Abancay.
Ante la situación en Gaza, AI acusa al gobierno alemán y a la Unión Europea de aplicar una doble moral. En su nuevo informe anual, la organización lamenta también el desprecio de las convenciones internacionales.